jueves, 28 de julio de 2011

Pedaleando desde Villanueva

Villanueva de Carrizo es un pueblo de León situado a la orilla del río Órbigo. Lo rodean las arboledas y tierras de cultivo de su ámplia vega y, más allá, los montes antaño dedicados al cultivo de centeno y el pastoreo. Los numerosos caminos utilizados por los habitantes para sus actividades agrícolas y ganaderas hacen de la bicicleta un medio ideal para disfrutar de los valores naturales y la historia de este territorio con el que, como se lee en El Quijote, "fue más agradecida y liberal la naturaleza que la fortuna".
Pedalearemos entre las sombras de los chopos, alisos y sauces que pueblan las orillas del río. Recorreremos encinares envueltos en aromas de manzanilla y tomillo y campos de labor sembrados de lúpulo o maiz. Quizá nos sorprenda en nuestra jornada ciclista la huida veloz de una liebre a nuestro paso, un zorro cruzando sigiloso el camino a lo lejos, el despegue majestuoso de una garza pescadora, el vuelo acechante de la pareja de milanos reales o, incluso la mirada asustada de un corzo en medio del monte.
Montados en nuestra bici volará nuestra imaginación por estos caminos que en lejanos tiempos fueron transitados por fieros astures de los castros de Pedregal y Turcia, legionarios romanos de las explotaciones auríferas de Las Omañas y Villarroquel o caballeros medievales acudiendo a batallar con los moros bajo los pendones de los señores de Ordás o Valdellamas.
En el pueblo disponemos de abastecimiento para la ruta: hay fuentes, bares, panaderías, carnicería, fábrica de embutidos, piscifactoría... En Carrizo y en Cimanes hay (o había) taller de bicicletas.
En fin, lo único que tiene que poner uno son piernas y ganas de disfrutar.
¡Feliz viaje!